En el Curso Ser Community Manager en el Tercer Sector, aparte de dedicarle una atención especial a esta figura en el conjunto de contenidos del programa, tenemos también un bloque dedicado exclusivamente a la figura del gestor de comunidades online en las ONG. Una de las prácticas que les pido a las personas que hacen el curso es que escriban un post sobre cuáles creen que son las peculiaridades y funciones, precisamente, de estas personas.
Es una práctica muy interesante y de la que creo que todos aprendemos mucho en varios sentidos. Nos ayuda a escribir mejor (pues la práctica en sí misma es un post), a la vez que reflexionamos sobre las cosas que nos hacen diferentes e iguales a los community de otros sectores.
Estos son mis post favoritos de las personas participantes sobre qué es ser community manager en las ONG:
- Cómo es ser community manager en 10 gifs. Un post muy divertido centrado en la personalidad de las personas que están detrás de las redes sociales. En este mismo formato, otro post que me pareció original fue 10 cosas que los community manager podemos aprender de los Simpson.
- Seamos la centralita de nuestra organización: esta alumna hizo una analogía muy interesante, comparando nuestra labor con la de las personas que atienden y distribuyen las llamadas de los públicos de nuestras entidades. También hay otras comparaciones que me han gustado mucho, me han hecho reflexionar y me han sacado una sonrisa: ser madre y community manager o un pirata que surca los mares
- CM en la encrucijada: un post que se centra en el reto de muchas muchas entidades no lucrativas, que “han entrado en la era digital, sin que la era digital haya entrado en ella”
La verdad es que cuanto más reflexiono sobre ello (y más leo sobre lo que otros han reflexionado) más tengo la sensación de que la figura del community no está en absoluto limitada o condicionada por una definición. La realidad supera siempre a la “norma” y creo que:
- es difícil encontrar, en nuestro sector o en otro, organizaciones en las que haya personas dedicadas exclusivamente a gestionar sus comunidades, mientras otros perfiles relacionados con la gestión de la comunicación on y offline son desarrolladas por otras personas (hablo de diseñar la estrategia de contenidos, de diseñar las estrategias de comunicación, de la imagen de marca….).
- la mayor parte de las cualidades, aptitudes y perfiles idóneos son comunes a los trabajos relacionados con la comunicación digital (habilidades de redacción, empatía, etc.) y el resto dependen más de la organización en la que se enmarque la figura que de la propia figura en sí.
Por eso esta práctica es tan rica. Cada persona cuenta un poco la experiencia o ideas que tiene. Y así vemos cómo en cada entidad las cualidades, perfiles y funciones del CM son diferentes. Quizás una parte esencial de LO QUE HACE sí es parecida en todas. Pero le diferencian muchas otras cosas muy importantes: cómo lo hace, por qué, qué más hace, con qué intensidad, quién más participa, … Y cada community manager, con sus variantes, es tan representativo de esta figura, como las demás. O no. Quizás en el curso seamos capaces algún día de sistematizar un ideal – asequible y que pueda ser asumido por todos… ¿Quizás en la próxima tanda de post que escriban los alumnos y alumnas…?
Es una reflexión un poco al aire, porque estoy ahora preparando la próxima edición del curso y me he puesto a darle vueltas. Pero si tienes algo que aportar, una reflexión, una experiencia, cuéntamela en los comentarios, prometo robártela y usarla para aprender 😛